El Abogado Experto en Gobierno Corporativo: Un Aliado Empresarial

Las empresas se caracterizan por ser dinámicas y estar en constante evolución, es por ello, que su crecimiento debe estar acompañado de cierto orden y principios de gobernanza que aseguren que cada nuevo paso de la empresa sea consistente con sus objetivos y asegure su permanencia en el futuro, sin comprometer la operación existente. Pero ¿cómo lograr este equilibrio?

Probablemente, ante una decisión empresarial que deba tomarse, la gerencia y el equipo comercial se inclinarán por crecer y tomar riesgos. Los accionistas esperarán el mayor rendimiento posible destinando una inversión razonable. Los directores serán más cautelosos y sopesarán los recursos y riesgos que implica la decisión. Y muy probablemente, el “malo de la película” será el departamento legal que querrá quitar el pie del acelerador y asegurarse de blindar a la empresa de todo posible riesgo que conlleve el nuevo proyecto. Parece una tarea difícil armonizar todos estos intereses.

En esa continúa evaluación del statu quo de una empresa y la discusión de cuáles serán sus próximos pasos, es donde cobra importancia el abogado experto en Gobierno Corporativo que acompañe a la empresa y a su departamento legal. 

Pero ¿qué rol debiese tener? ¿Qué hará diferente que no haga ya el departamento legal o la administración de la empresa?

El asesor legal en gobierno corporativo debe buscar asesorar de forma integral, brindar nuevas perspectivas y una óptica legal crítica e independiente, desde fuera de la empresa. Estará ahí para hacer las preguntas correctas en el momento preciso.

Por ejemplo, cuestionará más de una vez ¿Si está la decisión alineada con la misión y visión de la empresa? ¿Si la decisión fue debidamente analizada y adoptada por las personas u órganos correspondientes? ¿Si se realizó la debida diligencia del proyecto?

¿Si está la empresa preparada para asumir el reto? ¿Cuál podría ser el mejor y peor resultado de la decisión? ¿Cómo afectaría a la empresa cada escenario y qué podría hacer al respecto?

Ante un nuevo proyecto de la empresa, el asesor legal en gobierno corporativo debe estar ahí para apoyar a la dirección y al departamento legal a sopesar los riesgos que implica, a delimitar cuáles serán las banderas de alerta (red flags) que definitivamente detendrían la decisión (No Go), así como para identificar cuáles situaciones constituyen riesgos que sí pueden ser asumidos por la empresa si se gestionan adecuadamente, y por supuesto, a identificar cuál es la estrategia legal para asumirlos.

Para lograr esta valoración de un proyecto, la empresa y su departamento legal deben estar en constante comunicación con el asesor legal en gobierno corporativo, desde las más tempranas etapas, en el momento oportuno para evaluar, prevenir y gestionar los riesgos. Si el asesor legal externo es informado hasta que la decisión ha sido adoptada y el proyecto se encuentra en marcha, habrá muy poco campo de acción para proteger a la empresa.

Una vez adoptada una decisión, el abogado experto en gobierno corporativo también será clave y trabajará de la mano con el departamento legal de la empresa, en el proceso de formalización del proyecto, tanto para asegurar que se cumplan con los requisitos corporativos aplicables (informar a accionistas e inversionistas, obtener las aprobaciones necesarias de terceros, preparar la estructura legal adecuada), así como para velar por que los contratos principales garanticen un adecuado manejo del proyecto y mecanismos de salida que protejan a la empresa del peor escenario (acuerdos de accionistas, acuerdos de inversión, alianzas estratégicas, seguros para riesgos transaccionales, cláusulas indemnizatorias, etc.)

El abogado experto en gobierno corporativo cuestionará, evaluará y brindará soluciones armonizadoras que permitan a la empresa dar pasos esenciales para su crecimiento, asumiendo únicamente los riesgos que sean aceptables de acuerdo con su misión y visión, en cumplimiento no solo de la legislación, sino también del sistema de cumplimiento y gobernanza adoptado por la empresa. Su función principal será escuchar y analizar todas las perspectivas de los actores clave de la empresa, para lograr que de forma integral y sistemática puedan adoptarse las mejores decisiones para la empresa y que su implementación sea exitosa.

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